El Athletic, en la máxima competición.

Estadio de San Mamés, 50000 personas, recientemente acabado, unas ganas increíbles de poder ver ganar al Athletic en su estreno, y sí, se logró, y encima en la máxima competición, dándonos el pase a la Liga de Campeones, donde juegan los históricos de Europa, dónde se juntan  los mejores equipos de todo el viejo continente. Estaba todo preparado, unos nervios increíbles, seguro que en cualquier parte de España, y en una gran parte del mundo, había un hincha del Athletic con su camiseta rojiblanca, negra o verde, viviendo el partido como si fuese el último que fu

éramos a jugar.

Ernesto Valverde no dudó a la hora de poner la alineación, colocó a los mismos 11 jugadores que en San Paolo, que tan buen resultado dieron de aquel infierno italiano. Defendieron el 1-1: Gorka Iraizoz; Óscar De Marcos, Carlos Gurpegui, Aymeric Laporte, Mikel Balenziaga; Ander Iturraspe, Mikel Rico, Beñat Etxeberria; Markel Susaeta, Aritz Aduriz e Iker Muniain.

Por su parte Benítez sacó a los mismos jugadores que en Nápoles, pero con el cambio de Insigne por Mertens.

Comenzó el partido con un control del partido rojiblanco, las gradas rugían muchísimo más que en el viejo San Mamés. Tímidas llegadas a la portería napolitana con un remate de cabeza de Gurpegui que se marchó a un lado del palo y con un remate con la pierna mala que falló Laporte en boca de gol mandándolo a las nubes. Continuó llegando el Athletic poco a poco hasta que Higuaín realizó dos disparos alarmantes en la portería de Gorka. Se acabó la primera parte con un gran juego de De Marcos en el lateral derecho y con un control absoluto de Iturraspe y Beñat en el centro del campo.

Ya en la segunda parte, nada más empezar a los dos minutos, un pase en profundidad por alto para Higuaín (en fuera de juego posicional), es cortado por Gurpegui y el rechace lo aprovechó Hamsik para poner el balón en la cepa del poste, imparable el tiro del eslovaco.

Unai López, ayer debutante en San Mamés.

Valverde estuvo rápido, y a los 10 minutos retiró del terreno de juego a Beñat, que realizó un partido bastante bueno en presión y metió a Ibai Gómez. Muniain se colocó en la mediapunta e Ibai en la izquierda. En una jugada aislada, en un córner, llegó el primer gol de los bilbaínos. El centro va al corazón del área pequeña y Gurpegui arrastra hasta tres defensores al primer palo para que Aduriz controle el balón solo, lo baje al suelo y remate a las redes. Un golazo que igualaba la eliminatoria otra vez. Apenas 8 minutos después, un balón largo se pasea por la frontal de la zaga italiana y entre los centrales, Albiol y Koulibaly, no se entienden con el portero, que también sale tarde, y Aduriz, el más listo de la clase, les cuela el balón por debajo quedándose solo frente a la portería y marcando a placer el segundo gol de la noche. Justo después del gol, el entrenador de Viandar de la Vera dio entrada a un chaval de 19 años, Unai López, que lleva un año maravillando en el equipo filial y que ayer aprovechó su debut, en un campo nuevo, en una competición insuperable, con una excelente actuación individual. De sus botas salió el tercer gol, ya que dio un pase magnífico por encima de la defensa, que Aduriz no quiso controlar por estar en fuera de juego, pero que Ibai lo supo materializar con un auténtico gol.

El partido estaba más que terminado, un Nápoles cansado que tuvo varios errores defensivos no estuvo a la altura de ese nivel superior que decía Benítez que tenían...

El Athletic consigue la clasificación a la Champions League gracias a la garra, el esfuerzo y a esa afición tan especial que tiene en las gradas llenando el estadio todos los partidos. Chapeau por ellos, que estuvieron más que a la altura del campo y de la competición. Sobresaliente actuación de Iturraspe, Mikel Rico y del debutante Unai López, que asemeja su juego al de Ander Herrera.